En relación con las condiciones laborales de las cajeras de las grandes superficies, me pregunto por qué las empresas no ponen sillas, ergonómicas o no, a disposición de estas trabajadoras.
Es humillante ver a una mujer gestante o con varices teniendo que cumplir con su horario laboral sobre 20 centímetros cuadrados y de pie cuando podría hacerlo con cierta comodidad. El Corte Inglés y alguna otra empresa tienen esta deferencia. ¿Por qué no todas?
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 4 de marzo de 2002