La primera edición del festival Musika-música en Bilbao, integrado en un eje europeo de maratones de música clásica que ya formaban Nantes y Oporto, se clausuró ayer en el Palacio Euskalduna con un notable éxito de público.
La organización estimó que aproximadamente 17.000 personas acudieron a los conciertos de pago y a las actuaciones de formaciones locales, con entrada libre. Fuentes de la organización mostraron ayer su satisfacción por haber conseguido un público variado 'desde aficionados a niños y personas que acudían a un concierto de música clásica'. Una vez cerrada la programación, con 36 conciertos de pago y otras 11 actuaciones gratuitas, se hizo una previsión inicial de 10.000 asistentes.
El reducido precio de las entradas, entre tres y seis euros, fue determinante en la atracción de espectadores durante las dos jornadas de duración del festival. Musika-música ha sido organizado por la Fundación Bilbao 700, y subvencionado con 865.000 euros (unos 144 millones de pesetas) por el Gobierno vasco, la Diputación de Vizcaya y el Ayuntamiento de Bilbao.
El festival se ha centrado en las composiciones de Mozart y Haydn. La programación ocupó de forma simultánea a lo largo de la tarde del sábado y de ayer el auditorio y tres salas del Euskalduna. En otros dos quioscos, ubicados en el exterior del recinto y en su vestíbulo, se sucedieron las actuaciones de grupos de conservatorios y otras formaciones locales.
Las grandes estrellas fueron el pianista Josep Colom, quien actuó en solitario y junto a la Orquesta Nacional de Burdeos Aquitania, la Sociedad Coral de Bilbao y la English Chamber Orchestra, para cuyas actuaciones se agotaron las localidades.
El origen de Musika-música se remonta a 1995 cuando un promotor de conciertos, el francés René Martin, puso en marcha en Nantes La Folle Journée con la pretensión de acercar los conciertos de música clásica a un público tan masivo como el de los ídolos del pop y rock.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 4 de marzo de 2002