Los nórdicos preparan su artillería para la cumbre de Barcelona. Al menos eso puede deducirse de la carta abierta que los primeros ministros de Dinamarca, Suecia y Finlandia enviaron a José María Aznar, en la que piden una mayor 'modernización de Europa'. Según los nórdicos, el proceso iniciado en Lisboa, bajo presidencia portuguesa hace dos años, 'ha perdido ímpetu' y 'la difícil situación económica actual exige, más urgente que nunca, reformas económicas'.
El documento incluye una agenda de cinco puntos:
1. Un plan de acción de servicios financieros que sirva de piedra angular para impulsar las reformas económicas; 2. lograr lo antes posible un Acuerdo Comunitario de Patentes; 3. agilizar la liberación del marcado energético; 4. establecer un nuevo e-Plan de Acción Europea para poder hacer factible una economía competitiva, y 5. impulsar la sociedad de la información, con especial hincapié en la tecnología de la información, en la biotecnología y en los campos de investigación y desarrollo.
Durante los últimos días, el anfitrión, Paavo Lipponen, primer ministro finlandés, ha mostrado abiertamente su malestar por las intenciones de algunos poderosos dentro de los Quince de 'marginar a los pequeños'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 5 de marzo de 2002