Más de ocho años después de la desaparición de Björn Erik, su familia aún se enfrenta a un doble tabú: "Es como si fuéramos nosotros los que tuviéramos que salir del armario, en vez de él. Además, el suicidio...", confiesa su madre, Anne Lise. 'La historia de un pecador' es el título que ofrece esta noche Documentos TV (23.40), un reportaje que reflexiona sobre la tolerancia y la religión al hilo de la ausencia de un noruego de 20 años, en apariencia feliz, y en el que se descubre un doloroso pasado fruto de las contradicciones entre la doctrina cristiana recibida y su homosexualidad.
Entre la lectura de pasajes del diario de Björn -"estaba abierto, para que pudiéramos encontrarlo", apunta su hermana-, en el documental de la GWD Production que emite el programa dirigido y presentado por Pedro Erquicia se intercalan los testimonios de la íntima amiga del joven desaparecido -"al leer que creía que Dios le había abandonado, he comprendido lo profundo que tuvo que ser su sufrimiento"-, el teólogo Nils Jordan Riedl -"el cristianismo no debe dar nunca la espalda a la realidad. Si lo hace, no cumple su misión"- y el de Ulf Lidman, un pastor de la iglesia de Suecia que ya puede vivir su condición de gay -"pasé más de 15 años de mi vida intentando ser algo que no soy"-.
Lidman llegó a trabajar para Exodus Internacional, un organismo apoyado por cristianos integristas que pretende la cura de los homosexuales. En el proyecto sigue el noruego Jan-Aage Torp, pastor de la iglesia de la Victoria: "Puedo decir sin miedo a equivocarme que Dios rechaza y condena la homosexualidad".
Apoya su opinión Valgerd S. Haugland, ex ministra de la Familia y la Infancia -"me opongo radicalmente a que los homosexuales tengan derecho a actuar públicamente según sus sentimientos"-. Y Rune está en tratamiento: "Es posible que en el futuro, dentro de 5 o 10 años, tenga pensamientos gays. Pero ahora sé quién soy. Me siento heterosexual, siento que mis pensamientos son completamente normales".
El tormento no tiene fin para la madre, Anne Lise: "No le dije a nadie que Björn Erik era gay. Y creo que ésa es la razón por la que nos dejó".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 6 de marzo de 2002