Jordi Porta, el cabeza de lista de la candidatura renovadora a las elecciones a la presidencia de Òmnium Cultural, que se celebran hoy, pidió ayer en un acto público con los medios de comunicación juego limpio en la noche electoral al actual presidente de la entidad cívica cultural nacionalista, Josep Millàs, que se presenta a la reelección tras 16 años en el cargo, y que evite abusar de su prerrogativa como presidente que le permite acumular votos delegados sin límite.
Porta, que se mostró optimista ante sus posibilidades de victoria, hizo un llamamiento a Millàs para que presentara su dimisión de forma inmediata y que no esperara a hacerlo dentro de dos años como ha anunciado en caso de ganar las elecciones. Rechazó el aspirante a la presidencia las acusaciones de Millàs de que los miembros de su candidatura no tuvieran experiencia en gestión cultural y valoró como muy positivo el debate público que ha generado la campaña de los dos candidatos. 'En Òmnium Cultural hace años que no se ha producido un debate de fondo sobre la función que debe desempeñar en la sociedad del siglo XXI como el que se ha generado en las dos últimas semanas', dijo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 7 de marzo de 2002