La sede del Bloc Nacionalista Valencià, situada en el entresuelo del número 28 de la calle San Jacinto de Valencia, apareció ayer con una de sus ventanas forzada y con todo el interior revuelto y destrozado. Desde el pasado agosto este local ha sufrido cuatro agresiones que hasta ahora habían afectado a su fachada, sobre la que se habían realizado pintadas, y a sus accesos, puertas y ventanas que habían sufrido destrozos, cerraduras que habían sido selladas con silicona o cristales rotos, recordó el secretario de Organización, Ferran Puchades. El partido expresó su confianza en que el asalto no sea un ataque político.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 9 de marzo de 2002