El jurado popular que debía pronunciarse sobre la muerte del ciudadano belga Jean Pierre Desloges, de un disparo de escopeta, dictaminó ayer que los hechos constituyeron un homicidio imprudente, y no un asesinato como defendía la fiscalía. José María Hinarejos, que se enfrentaba a una petición fiscal de 19 años de cárcel, salió en libertad ya que la fiscalía tuvo que rebajar su solicitud de pena a un año y nueve meses, periodo que el acusado ya ha cumplido en prisión preventiva.
El jurado dio por buena la versión del acusado, de 42 años y vecino de Miami Platja, en el municipio de Mont-roig del Camp (Tarragona), según la cual disparó la escopeta de caza que portaba porque Desloges no salía de su domicilio y uno de los disparos impactó a través de la puerta en la garganta del belga y le causó la muerte instantáneamente.
Los hechos sucedieron hace dos años, a raíz de una disputa motivada por una pelea que habían tenido sus respectivos hijos, de 13 y 15 años, por un asiento del autobús escolar.
Desloges acudió a casa del acusado y agredió al hijo de éste, de 15 años, lo que hizo que a su vez Hinarejos acudiera al domicilio del belga con intención de devolverle la agresión.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 9 de marzo de 2002