La Brigada de Policía Judicial detuvo ayer en Palma de Mallorca a la funcionaria argentina Mónica Fernández, reclamada por la Justicia de su país, que la acusa de haberse apropiado, supuestamente, de unos 660.000 euros de las arcas públicas. El presunto fraude sucedió entre 1997 y 1999, mientras Fernández era administradora de fondos de ayudas y subsidios a necesitados de la provincia de Buenos Aires.
Fernández tiene una petición de extradición, que deberá cursarse a través de la Audiencia Nacional, por delitos de malversación de caudales públicos y falsedad documental. La prófuga hacía varios meses que se hallaba en Mallorca, donde mantenía actividades privadas relacionadas con el turismo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 9 de marzo de 2002