José María Aznar hizo, en la convención de jóvenes dirigentes del Partido Popular Europeo, en Salamanca, una alusión crítica dirigida al PNV - la única que cosechó aplausos entre los jóvenes asistentes- por su actitud ante el terrorismo de ETA. 'No os fiéis de los dirigentes políticos que piensan que transigir con el terrorismo es políticamente más correcto y más cómodo. Se equivocan porque el día que el terrorismo ve la posibilidad de sobrevivir, ese día la democracia ha empezado a perder la batalla'.
El presidente defendió su política de firmeza contra el terrorismo. 'No cabe transacción, diálogo o apaciguamiento con el terrorismo. O se acaba con él o se corre el riesgo de destruir la sociedad'. Y reiteró su determinación: 'Nadie que pueda apoyar o comprender al terrrorismo se va a sentir seguro. Todo aquél que tenga que ver con el terrorismo será entregado a los tribunales de Justicia'. La alusión a las medidas legales que prepara el Gobierno para asfixiar política y económicamente a Batasuna, incluida su ilegalización, estuvo presente en este pasaje de Aznar y en el clima del encuentro.
También recordó a los jóvenes líderes europeos conservadores los obstáculos que tuvo España en Europa y en el ámbito internacional, en su conjunto, para afrontar la lucha contra ETA en el pasado. 'Una lucha que España ha tenido que asumir en solitario durante muchos años'.
Y se refirió de nuevo a los atentados del 11 de septiembre contra EE UU como un hito en la lucha antiterrorista, al que Aznar llegó a dar más importancia histórica que a la caída del Muro de Berlín, en 1989. 'Ha tenido que ocurrir el 11 de septiembre para lograr una excelente cooperación contra el terrorismo, pero no pasa nada, porque lo importante es que las cosas han cambiado', concluyó.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 10 de marzo de 2002