Selecciona Edición
Selecciona Edición
Tamaño letra
Crítica:TANGO

Esa música brutal

Es bonito ver a un público en gran parte neófito -se oye hablar del bandoneonista Nini Flores como 'el tipo del acordeón'- recibir su primera comunión de tango. Sí, lo que hace finalmente Gotan Project es un muestrario de músicas argentinas urbanas y rurales, aunque aderezado con esos beats y sampleados que enganchan a la generación de la electrónica, mayoritaria esta vez. El tango es la esencia; las programaciones, lo accesorio.

El grupo resuelve con inteligencia la presentación en directo del disco La revancha del tango. Hay insertos sonoros que no están en las versiones grabadas y una tenue pantalla situada delante de los músicos sirve para proyectar hipnóticas imágenes de bailarines, gauchos y señoritas en ropa interior. A mitad del concierto, cae el telón y Gotan Project se atreve con números acústicos y breves improvisaciones en el espíritu del jazz. El pianista Gustavo Beytelmann lanza ráfagas disonantes, la violinista Line Kruse pellizca y rasguea su instrumento, Eduardo Makaroff toca su esbelta guitarra; sólo la espléndida Cristina Vilallonga está limitada a medidas participaciones vocales.

Gotan Project

La Riviera, Madrid. 9 de marzo.

Hacia el final, los alquimistas de las máquinas, Philippe Cohen Solal y C. H. Müller, lanzan unos ritmos brasileños que logran una grata catarsis. Buenos Aires y Río, iluminando el Manzanares.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 11 de marzo de 2002