¿Está usted a favor de una ley que prohíba el consumo de bebidas alcohólicas en la calle? El 64% de los madrileños contestaría sí a esta pregunta, según una encuesta realizada por el área de Salud y Consumo del Ayuntamiento de Madrid. El 32,6%, en cambio, está en contra de la ley antibotellón. Por edades, el 54,4% de los jóvenes entre 18 y 29 años está en contra de la norma, y el 41,6%, a favor.
El sondeo fue realizado los pasados 13, 14 y 15 de febrero, en pleno debate ciudadano sobre el botellón y tres semanas antes de que el Gobierno regional anunciara que, en los próximos meses, promulgará una ley para prohibir el consumo de alcohol en la calle y su venta en establecimientos a partir de las diez de la noche. 'El botellón se ha convertido en uno de los más graves problemas juveniles y sociales de nuestro tiempo, motivo por el que se proyecta la elaboración de una ley dirigida a evitar reuniones masivas de jóvenes', se afirma en el texto de introducción de este sondeo municipal.
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Según la encuesta, el 29% de los madrileños opina que los padres son los responsables de que cada fin de semana 15.000 jóvenes acudan a las plazas y calles de la capital a beber alcohol en grupo. Pero el Ayuntamiento y el Gobierno regional tampoco se libran: el 25,4% de los encuestados piensa que las autoridades son las culpables de que los chavales practiquen el botellón. En el tercer lugar en el ranking de responsables estarían los jóvenes (22,2%); y en el cuarto puesto, los expendedores de bebidas alcohólicas, con el 17,8%.
Problema cultural
Según Gerardo del Val, concejal de IU, estos datos demuestran que el fenómeno del botellón parte 'de un problema cultural y de formación'. 'Los jóvenes, con el botellón, están reclamando un espacio vital que les está negando la sociedad', afirma Del Val. Y agrega: 'Todo el mundo está de acuerdo en que hay que abordar este problema. Pero cuando el Ayuntamiento pregunta a la gente si está a favor de una ley debería añadir que incluye el cierre policial de las plazas del botellón y que los chavales no tienen otras alternativas de ocio'.
Además, la encuesta del Ayuntamiento señala que, para el 42% de los madrileños, la medida más efectiva para combatir el botellón sería sancionar a los locales que fomentan esta práctica, es decir, a los comercios a donde los chavales acuden a comprar el alcohol porque les sale mucho más barato que en los bares y discotecas. Alrededor de 15.000 chicos practican todos los fines de semana el botellón en la capital, según fuentes policiales.
El 23,8% de los encuestados piensa que la medida más efectiva sería prohibir el consumo y la venta de alcohol por las noches, y el 23,6% pide una mayor presencia policial en las zonas de botellón. 'El 42% de los madrileños, según esta encuesta, está a favor de medidas preventivas, que nada tienen que ver con la coacción policial que se está haciendo contra los jóvenes. La represión lo único que hace es esconder el problema y no solucionarlo', concluye Del Val.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 14 de marzo de 2002