El Festival del Dragón, la fiesta de la cultura hippy que venía celebrándose de un modo cada vez más multitudinario en la localidad granadina de Órgiva, en La Alpujarra, quedó ayer definitivamente suspendida después de que el Ayuntamiento del pueblo decretara su prohibición por las 'molestias' que causaba a los vecinos del pueblo. El festival, que el año pasado llegó a reunir a 10.000 personas procedentes de toda Europa, carecía de una organización adecuada.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 16 de marzo de 2002