La bolsa española termina esta semana con un resultado neutro del que no pueden sacarse muchas conclusiones. La contratación ha sido muy baja y los índices muestran un ligero retroceso como consecuencia de la resistencia de los inversores a tomar posiciones en tanto la economía europea no aporte señales inequívocas de recuperación.
En esta última sesión los índices subieron ligeramente, el 0,79% el Ibex 35 y el 0,74% el de la Bolsa de Madrid, con lo que dejan atrás el temor provocado por cuatro recortes consecutivos en el Ibex 35. En el conjunto de la semana el Ibex 35 cede el 0,61% y Madrid un 0,23%, dos datos que permiten a los analistas hablar de consolidación al referirse a este proceso.
Ayer, la economía estadounidense volvió a dar muestras de solidez a través de las cifras de producción industrial y de capaicdad industrial en uso en el mes de febrero, ambas positivas, al tiempo que el índice de confianza de los consumidores elaborado por la Universidad de Michigan para el mes de marzo apuntaba hacia una firme recuperación con una subida de casi cinco puntos.
Estos datos mantienen las expectativas de subida en Wall Street y permiten a las bolsas europeas dejarse llevar por la inercia, aunque las circunstancias no sean las mismas. El BCE considera en su último informe que el nivel de los tipos de interés es el adecuado para lograr la recuperación de la economía, mensaje que deja entrever cierta solidez de fondo o, cuando menos, que no hacen falta apoyos para abandonar las proximidades de la recesión.
La contratación en el Mercado Continuo subió ayer hasta los 2.516,01 millones de euros, en parte porque era día de vencimiento en el mercado de futuros y, también, porque las operaciones institucionales aportaron más de 600 millones de euros al total, casi el 25% del dinero que se movió ayer en la bolsa española.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 16 de marzo de 2002