Ya, déficit cero. Ahora comprendo por qué mi universidad no me paga una beca que me debe desde noviembre del año pasado. Ahora comprendo por qué nuestro grupo no recibe el dinero, que necesitamos para seguir trabajando, de un proyecto de investigación que tenemos concedido. Por eso estamos tan parados, porque vamos a la velocidad del déficit cero. Ya.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 17 de marzo de 2002