El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, líder de la coalición italiana de centro-derecha, la Casa de las Libertades, no se considera en absoluto un hombre de derecha, sino 'un moderado, de centro'. En declaraciones al diario británico The Times, durante la cumbre de Barcelona, el magnate italiano aclara además que el partido que fundó en 1994, Forza Italia, puede describirse como un partido de centro-izquierda.
Berlusconi justifica así el verdadero sentido de la alianza con el líder británico Tony Blair, con el que firmó un documento conjunto sobre la flexibilidad laboral, hace unas semanas en Roma. Documento que ha merecido duras críticas de los sindicatos británicos a Blair. Il Cavaliere aclara que no puede ser considerado como 'un aliado equívoco' de Blair. 'Soy un hombre de centro, un moderado por excelencia', dice Berlusconi, que subraya haber aprendido la política 'de hombres de izquierdas y de centro'. De ahí, el primer ministro da el salto mortal y declara: 'Forza Italia podría ser descrito incluso razonablemente como un partido de centro-izquierda'.
Forza Italia ocupa, en realidad, el espacio político que dejó vacante la Democracia Cristiana, el gran partido católico que gobernó Italia durante 50 años y una de las dos fuerzas (con el PSI) barridas de la escena política con el escándalo Tangentópoli, en 1992.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 19 de marzo de 2002