El parlamentario socialista navarro, José Luis Uriz, anunció ayer, en rueda de prensa ofrecida en el exterior de la factoría donde trabajaba, que demandará al presidente de Onena, Iñaki Mendizabal, por considerar su despido, tras 36 años de trabajo en la empresa, como 'ilegal, injusto e inmoral'. Uriz atribuye su expulsión de la empresa papelera a una campaña de acoso psicológico a causa de su oposición a 'una privatizción fatal para mi empresa, mis compañeros y Navarra'. 'Desconfiabamos de Mendizabal, ya que las tres últimas empresas en que ha estado han sufrido incendios', dijo en otro momento, según informó Europa Press.
El parlamentario foral anunció que presentará ante el Gobierno de Navarra un plan contra el acoso psicológico en el trabajo y dijo que hay que considerar a quienes lo sufren 'igual que a las víctimas del terrorismo'. La empresa afirma que Uriz justificaba por motivos sindicales horas que dedicaba a su actividad parlamentaria, con lo cual habría recibido una doble remuneración -la de la empresa, obligada a pagar sus horas sindicales, y las del Parlamento navarro que le abonaba dietas-. Uriz negó estos extremos y, por contra, afirmó que la empresa Onena es 'la más denunciada en Navarra' y tiene el doble de siniestralidad de la media de su sector.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 19 de marzo de 2002