Los transportistas de la capital jiennense colapsaron ayer por la mañana el centro de la ciudad para exigir al Ayuntamiento medidas que les permitan desarrollar su trabajo. Medio centenar de vehículos circuló en caravana provocando fuertes retenciones y la asociación que los agrupa amenazó con dejar sin suministros al comercio si no hay una respuesta a sus demandas por parte del equipo de gobierno, formado por el PP. Los transportistas quieren un carril de servicios, que se haga respetar la zona de carga y descarga y que se tenga en cuenta su opinión en los cambios que se produzcan en el tráfico. La protesta terminó con una entrega simbólica de productos de reparto, desde leche hasta naranjas, a una residencia de ancianos de la capital regentado por religiosas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 20 de marzo de 2002