El Gobierno italiano canceló ayer su participación en el Salón del Libro de París que se inauguró el jueves, y en el que Italia es el invitado de honor, como consecuencia de la manifestación contra el jefe del Gobierno, Silvio Berlusconi, celebrada durante la apertura.
La retirada italiana fue anunciada por el subsecretario de Estado italiano para los Bienes Culturales, Nicola Bono, que representó a su país el pasado jueves. El primer acto anulado fue la conferencia sobre arte italiano que iba a pronunciar el subsecretario de Cultura, Vittorio Sgarbi. También serán suspendidas todas las actividades en las que estaba previsto que participaran miembros del Gobierno.
Responsables del Salón del Libro aseguraron que la presencia editorial italiana se mantiene. Continúan, pues, en el Salón los 60 autores que integran la delegación oficial así como los escritores que decidieron viajar por su cuenta en señal de protesta contra la política cultural del Gobierno de Berlusconi.
Ayer, la ministra francesa de Cultura, Catherine Tasca, expresó su 'viva desaprobación' por la manifestación en contra Berlusconi, acto que bloqueó temporalmente el acceso al pabellón italiano durante la ceremonia de inauguración.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 23 de marzo de 2002