En una Bolsa marcada por el tedio, los inversores han encontrado nuevos incentivos con el lanzamiento de una serie de oferta pública de adquisición (OPA) con las que hacer plusvalías.
En algunos casos, como los de Heineken o Cristalería, se trata del interés de las matrices de sacar del mercado a sus filiales. Otras operaciones, como la de Arcelor, responden a proyectos internacionales. Y en ocasiones, como la oferta de Caprabo sobre Enaco o la lanzada sobre Iberpistas, responden al interés de alguna empresa en crecer aprovechando la oportunidad de compra que ofrecen dos largos años de caídas de cotización.
Según los analistas, empresas como Altadis, Iberia, Carrefour, Unión Fenosa, Iberdrola, Cepsa, Repsol, Urbis, Telepizza, NH Hoteles o Zeltia están en el punto de mira como opables.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 24 de marzo de 2002