Las tres organizaciones humanitarias que están atendiendo a los 7.000 inmigrantes sin contrato de trabajo en la campaña de la fresa en la provincia de Huelva, Cáritas Diocesana, Huelva Acoge y Cruz Roja, tienen previsto poner en marcha hoy el Plan Humanitario de Emergencia Social en distintas localidades. En Palos de la Frontera el reparto de alimentos se inició el sábado, donde Cáritas distribuyó 300 bolsas de comida.
El plan pretende dar cobertura a las necesidades básicas de supervivencia tales como alimentación, cuidados sanitarios, elementos de aseo e higiene y ropas, a la vez que persigue de facilitar el desplazamiento a otras zonas para que puedan encontrar trabajo.
Los alimentos llegarán a unas 2.800 personas, durante un mes. Sin embargo, Cáritas negoció con la Junta de Andalucía para que la ayuda humanitaria no se limite sólo a la campaña de la fresa, sino que pueda prolongarse en función de las necesidades del colectivo inmigrante. 'Hay un compromiso verbal por parte de la delegación de Asuntos Sociales de mantener las ayudas hasta que se acabe la situación de necesidad. Después se valorará la viabilidad de continuar o no', afirmó el portavoz de Cáritas Diocesana, Gonzalo Revilla.
La ayuda humanitaria está dirigida principalmente a los extranjeros sin posibilidad de tener trabajo en la campaña fresera porque su situación es irregular, carecen de los permisos de trabajo y residencia. Existe otro grupo, también beneficiario de esta ayuda, que aunque con permisos de trabajo, no encuentran empresarios que los contraten.
Cáritas Diocesana se encargará de distribuir los alimentos, y Cruz Roja de la atención sanitaria. El reparto se realizará lunes, miércoles y viernes. La bolsa irá surtida de pan, leche, fruta, fiambre de pollo o pavo o queso, conserva de pescado, legumbres o pasta, chocolate y zumo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 25 de marzo de 2002