El 3% de las denuncias sobre malos tratos que se plantearon durante 2001 a través del Teléfono del Maltrato Infantil de la Consejería de Asuntos Sociales son formuladas por los propios niños afectados, según informó ayer la Junta de Andalucía. La mayoría de las llamadas son de personas que no se identifican, que representan el 74% de los casos. Entre quienes se identifican abundan los vecinos de menores maltratados (el 13%), seguidos de los familiares (11%).
Durante el año pasado, este teléfono recibió 190 denuncias de supuestos malos tratos infantiles, aunque el número total de llamadas ascendió a 1.835. La mayoría tenían como finalidad pedir información y asesoramiento. Los malos tratos notificados correspondieron a casos de abandono -como la falta de alimentación, vestuario o higiene- en 113 casos. Otros 67 denunciaban agresiones como magulladuras, quemaduras o fracturas, mientras que 48 llamadas denunciaban casos de maltrato emocional como amenazas o rechazo.
Aunque en menor medida también se formularon denuncias por obligar al menor a mendigar y explotación laboral y otros por abuso sexual e inicitación al consumo de drogas. Sevilla, con un 41% de las denuncias, fue la provincia desde la que más se acudió durante 2001 al Teléfono del Maltrato Infantil (900 21 09 66).
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 26 de marzo de 2002