La artista alemana Karin Scholz, que trabaja en el Museo Erótico de Hamburgo, ha tenido la idea de decorar con temas eróticos una serie de huevos de oca que ha importado de Hungría y vende al precio de 125 euros cada uno.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 29 de marzo de 2002