Los seis empresarios agrícolas detenidos esta semana en Orihuela (Alicante) por la Guardia Civil por contratar supuestamente a inmigrantes indocumentados han quedado en libertad provisional. El titular del Juzgado número 1 de Orihuela decretó ayer esta medida 'por entender que se trata de personas conocidas y que no existe riesgo de fuga', precisaron fuentes de la investigación. El magistrado sólo ha impuesto a los imputados la obligación de comunicar un cambio de domicilio y comparecer en el juzgado cuando sean citados.
El arresto de los empresarios se produjo en el marco de una operación de la Guardia Civil contra la contratación irregular de extranjeros para faenas agrícolas en las explotaciones de la comarca de la Vega Baja, al sur de Alicante. Los agentes inspeccionaron 150 vehículos, la mayoría furgonetas, e identificaron a 300 temporeros, casi todos inmigrantes procedentes del Magreb, Latinoamérica y del este de Europa. De los braceros identificados, un centenar fue trasladado a las dependencias de la Guardia Civil para comprobar su situación de legalidad en España. Un total de 65 serán expulsados por carecer de permiso de residencia.
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 29 de marzo de 2002