La lluvia y el tiempo desapacible aguaron ayer la jornada festiva a quienes disfrutaban de ella en la costa mediterránea y forzó a suspender procesiones en Sevilla, Granada, Mazarrón y La Unión (ambas en Murcia). En la capital andaluza cuatro cofradías cancelaron la estación de penitencia para evitar que un eventual chaparrón destrozase sus tallas, de los siglos XVI y XVII. Algunas de las procesiones de la madrugá sevillana, como la del Cristo del Gran Poder, también decidieron no salir.
La fuerza del viento provocó que a las 15.40 horas de ayer el barco de la compañía Balearia Manuel Azaña chocase contra el muelle del puerto de Ibiza y tuviera que quedar amarrado en el puerto de la capital ibicenca. El buque realizaba la maniobra de desatraque, con la intención de zarpar rumbo a Denia, procedente de Palma y cuyo destino era el puerto ibicenco de San Antonio.
El mal tiempo obligó a desviarlo al puerto principal de la isla que poco después quedó cerrado al tráfico marítimo, según informó la autoridad portuaria. Asimismo en el de Palma de Mallorca fueron cancelados varios movimientos por los mismos motivos.
La compañía marítima Trasmediterránea suspendió la salida de sus buques entre Melilla y Málaga y Almería por el fuerte temporal en el Mar de Alborán y el litoral melillense, según informó a Efe un portavoz de la empresa. Además fueron anuladas todas las salidas de barcos de línea regular entre Algeciras y Ceuta. Anoche Protección Civil había retirado los avisos por fuertes vientos en la zona del Estrecho pero los mantenía en Cataluña (excepto Lleida), Baleares, Alicante y Murcia.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 29 de marzo de 2002