España sigue siendo la bestia negra de Brasil. Le quitó el Campeonato del Mundo, le venció en el Torneo FIFA de Singapur y le volvió a ganar ayer, 4-3, en Torrejón, en el trofeo del Centenario del Madrid. El conjunto que dominó el fútbol sala en sus primeros años internacionales sólo jugó a la contra, esperando los fallos de una España más sólida, pese a que cometió algunos fallos. El equipo que dirige Javier Lozano se adelantó por dos veces en el marcador, con goles de Daniel (1-0) y Cobeta (2-1), igualó con otro de Kike (3-3) y ganó con uno de oro, de Joan, en un doble penalti, tras desperdiciar dos antes Rodríguez y Daniel.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 1 de abril de 2002