Santiago Martín Bermúdez (Madrid, 1947), licenciado en Ciencias Políticas, escritor y colaborador de Radio Clásica, ha recibido el XIV Premio Nacional de Teatro Enrique Llovet, otorgado por la Diputación Provincial de Málaga, por su obra El vals de los condenados. Este premio es uno de los más importantes de España, junto con el Tirso de Molina y el Lope de Vega y el segundo en dotación económica, 15.025 euros.
'Lo más interesante es ver que hay una institución que saca un galardón muy bien dotado y organizado. Además el jurado ha sido totalmente independiente. No pertenece a ningún grupo de presión y eso es fundamental', dice Santiago Martín.
Más de 100 piezas optaron al premio que finalmente recayó en la última obra del dramaturgo. 'A esta obra le estuve dando vueltas más de 10 años. Yo soy muy francófilo, amo a Francia como si fuera mi país. Se me ocurrió plantear un encuentro en el infierno pagano entre intelectuales del siglo XX', explica el autor. 'Louis Aragon defendía el comunismo y Drieu La Rochelle tenía pensamiento nazi, justamente lo contrario. Ambos fueron amigos en vida. En mi obra los reencuentro, tras cuarenta años, con André Malraux, un revolucionario. Los tres esperan el juicio de la posteridad y su abogada será una profesora de La Sorbona especialista en estos intelectuales', comentó Martín Bermúdez acerca de su obra.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 5 de abril de 2002