El acuerdo entre nacionalistas y socialistas vizcaínos para mantener el peaje en la A-8 y costear así cinco proyectos viarios presupuestados en 510 millones de euros fue rechazado ayer de plano por el PP. A su juicio es 'inaceptable' que la Diputación 'cobre peajes por servicios de competencia exclusiva'.
El portavoz en las Juntas Generales, Carlos Olazabal, valoró el acuerdo suscrito como 'un paripé que ya había sido acordado con Montalbán [el portavoz del PSE] al aprobar los presupuestos en diciembre y que pretende justificar el hecho de cobrar más impuestos por la vía indirecta'.
Olazabal consideró 'un insulto' que se haya sustituido el peaje por un canon, que supone rebajar a la mitad el coste actual a partir de junio de 2003, fecha en la que concluye la actual concesión privada. Censuró que se justifique el mantenimiento del pago en la autopista 'diciendo que no hay dinero, pero tienen 100.000 millones de pesetas para invertir en la Feria de Muestras más cara del mundo'. Añadió que no está demostrada la necesidad de construir una nueva gran variante, que absorberá 270 millones de euros, y defendió el cierre del anillo metropolitano a través del corredor del Txorierri.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 10 de abril de 2002