Tinto elaborado en blanco, el rosado anuncia la llegada de los calores con su vestido primaveral, que tanto se tiñe del salmón subido como de rojo pálido o de piel cebolla, pasando por el rosa que le da nombre. Es la estacionalidad que nos acecha, cada año, para hacer buena esa manida frase de 'un rosadito fresquito, que va bien con todo'.
Pero aunque sea vino veraniego, debe superar la estacionalidad y creer en su destino más allá del consumo desenfadado. Puede, y debe, merecer su inclusión en la categoría de los vinos de calidad, lo que presupone un plus necesario de personalidad. Entonces sí, el rosado puede superar el estado infantiloide en el que se encuentra, pero sin perder juventud, que es su tesoro. Nuevos rosados en los que el varietal -fundamentalmente garnacha, pero también tempranillo, monastrell, bobal, merlot, mencía, cabernet sauvignon o syrah- aporte su peculiar paleta aromática, el fulgor de su origen, sin renunciar al alcohol ni al cuerpo.
Éste es el carácter esencial de todo vino rosado que se precie: juventud arrolladora cargada de aromas varietales primarios, paladar sabroso, un punto goloso de frescura desenvuelta que brilla en la boca, pero deja un cargado recuerdo de serena consistencia.
Estos rosados para cualquier tiempo del año y momento existen. Los seis que se recomiendan a continuación son un buen ejemplo.
BEBER
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Can Rafols dels Caus. DO: Penedés. Variedades: merlot. Grado: 13%. Precio: 9,80 euros. Puntuación: 8/10.
ESBELTO y meloso, destaca la elegancia de su aroma frutal y floral. Sabroso, consistente, fresco por su acidez, y con cuerpo para dejar un gusto prolongado.
Condes de Fuensalida.
DO: Méntrida.
Variedades: garnacha.
Grado: 12%.
Precio: 2,10 euros.
Puntuación 7,5/10.
PAISAJE aromático con frutillos rojos (fresa) y un toque de planta retama. Tiene un frescor afrutado que da viveza al vino, sin caer en la banalidad
Julián Chivite. DO: Navarra. Variedades: garnacha. Grado: 12,5%. Precio: 4,50 euros. Puntuación: 7,5/10.
SU intensidad aromática se enriquece con la acidez que da al vino un aire refrescante. Alegre y al final permanece un contrapunto dulce-amargo.
Señorío de Sarriá Viñedo nº 5
Bodega de Sarriá.
DO: Navarra.
Variedades: garnacha.
Precio: 5,30
euros. Puntuación: 7,8/10
IMPACTO olfativo lleno de notas silvestres y la nota distinguida de florecillas de prado. Suave, presencia en boca y una acidez que compensa cierto gusto goloso.
Lezcano Lacalle.
DO: Cigales. Teléfono:
983 58 56 59 49.
Variedades: tinto fino.
Precio: 3,80 euros.
Puntuación: 7,5/10.
DE una refrescante y sabrosa sensación agridulce, con una frutosidad intensa (fresa, frambuesa, mora). Carnoso, fresco, recuerda a los mejores claretes de Cigales.
Viñátigo CB.
DO: Ycoden-Daute-Isora (Tenerife).
Variedades: listán negro. Precio: 4,20 euros.
Puntuación: 7/10.
UN afrutado poco habitual, con notas de fruta exótica y recuerdos herbáceos, bañado por acidez. En boca, los sabores golosos evolucionan hacia un elegante amargor.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 13 de abril de 2002
