La agencia estadounidense de medicamentos, la FDA, anunció el lunes que ha aprobado el uso de la toxina botulínica A, cuyo nombre comercial es Botox, como antiarrugas. Botox inhibe las arrugas formadas por la mímica facial. En febrero, Sanidad alertó contra este uso al no estar aprobado en la UE.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 17 de abril de 2002