La factoría de Alstom -la antigua Maquinista Terrestre y Marítima- de Santa Perpètua de Mogoda (Vallès Occidental) fue el escenario, ayer, de la puesta de largo de Barcelona, la cabina del Trambaix, el tranvía que entre el verano y el otoño del próximo año circulará por la Diagonal de Barcelona para unir la capital con las ciudades del Baix Llobregat.
El consejero de Política Territorial, Felip Puig, y el presidente de Trambaix, Albert Vilalta, presidieron la presentación de los convoyes. 'Las apariencias engañan porque aquí hay mucha gente con traje y corbata, pero este es un acto revolucionario', declaró Puig, y destacó la apuesta de modernidad y sostenibilidad en el transporte público que supone el tranvía. El nuevo servicio lo configurarán 19 trenes con capacidad para 218 plazas cada uno que circularán a 20 kilómetros por hora con una frecuencia entre 4 y 16 minutos.
El comité de empresa de Alstom aprovechó la visita de Puig para solicitar que la Administración se comprometa a despejar la incógnita sobre el futuro del millar de trabajadores de la factoría ante las futuras inversiones ferroviarias en Barcelona y su área.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 20 de abril de 2002