Las familias bilbaínas que acojan a uno de los más de 400 niños saharauis que llegarán en julio a Euskadi dentro del programa Vacaciones en paz deberán pasar previamente un control psicológico para acreditar su idoneidad para recibir al menor. De los 23.000 escolares que viven en los campamentos de Tindouf, alrededor de 10.000 salen cada año en programas similares.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 20 de abril de 2002