Los dos casos de ablación de clítoris certificados hasta la fecha en España se han producido en Cataluña y han terminado en los tribunales, uno en 1993 y otro el año pasado en la provincia de Girona.
Según dijo la antropóloga Adriana Kaplan en el VI Congreso de Inmigración de la Universidad de Almería, los sistemas de prevención han impedido que en los últimos años se llevaran a cabo 10 intervenciones más a menores inmigrantes.
La detección a tiempo ha sido posible por una red de alerta en la que los colegios y los centros médicos desempeñan un papel fundamental, explicó la antropóloga.
Cuando existen sospechas se denuncia ante los jueces, que en algunos casos llegan a ordenar una retirada cautelar del pasaporte para que las niñas no puedan viajar. A veces las pequeñas son sometidas a una revisión ginecológica, que se repite a la vuelta para comprobar que no se ha practicado la ablación.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 22 de abril de 2002