La nueva vuelta de tuerca en los problemas del sistema financiero argentino, con el cierre de los bancos, afectó con fuerza a los valores españoles desde primeras horas de la mañana, aunque al cierre de la sesión las cotizaciones consiguieron recuperarse ligeramente desde los mínimos del día.
La apertura de Wall Street, otra vez con problemas en las sociedades tecnológicas, sólo sirvió para confirmar las crecientes tensiones de la economía en esta fase de reajuste en la que se intenta cerrar la crisis y abrir el proceso de recuperación.
El Ibex 35 cedió el 0,68%, y el índice general de Madrid, el 0,57%, en una jornada en la que la contratación en el Mercado Continuo fue la más baja de este mes, con 1.369,82 millones de euros. De esta cantidad, algo más del 10% procedía de operaciones institucionales.
La caída en el volumen negociado era consecuencia de la resistencia de los accionistas a asumir riesgos en los grandes valores, justo ahora que los problemas de Argentina indican que se ha avanzado muy poco en la resolución de la crisis.
La espectacular caída de los depósitos bancarios augura problemas a medio plazo para estas entidades y la Bolsa española se ha hecho eco inmediatamente de la parte que les puede tocar a sus representantes en aquel país.
Las acciones del BBVA cayeron al cierre el 2,02%, 0,28 euros, aunque llegaron a bajar 0,38 euros en los peores momentos, mientras que los títulos del BSCH cedieron el 0,58%, 0,06 euros, con una pérdida máxima en la sesión de 0,21 euros.
El resto de las bolsas europeas tampoco tuvo una actuación brillante, con un recorte del 1,02% en París, del 0,42% en Londres, mientras que Francfort perdía el 1,59% poco antes del cierre, coincidiendo con un descenso de más de 100 puntos, el 1,05%, en el Dow Jones.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 23 de abril de 2002