La dirección de la planta de Atofina en Hernani, dedicada a la producción de PVC, se reunió ayer con el comité de empresa y le comunicó que reforzará las medidas de seguridad de la fábrica y los controles sanitarios a los trabajadores, aunque insistió en que cumple la legislación vigente. La reunión se celebró una semana después de que la Fiscalía de Guipúzcoa abriera diligencias para investigar las causas de la muerte en los últimos 12 años de 27 personas que trabajaron en la empresa y determinar si los fallecimientos tienen relación con la actividad que se desarrolla en la fábrica, donde se manipulan sustancias cancerígenas.
La reunión duró alrededor de un cuarto de hora, según dijo el miembro del comité Alejandro Erdocia. La dirección insistió ante los representantes de los empleados en que la empresa 'cumple con la normativa vigente en materia de seguridad y salud laboral, por lo que no existe riesgo para los trabajadores'.
Apuntó además que se siguen las medidas recomendadas por Osalan, según explicó el director de la planta, José Luis Pérez, quien, en cualquier caso, señaló que éstas se 'reactualizarán' para asegurar su cumplimiento. Pérez agregó que la empresa realizará 'la vigilancia médica y la repetición analítica que haga falta para que nuestros trabajadores estén seguros con su salud'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 24 de abril de 2002