Todo retrato de Jesucristo que saca a relucir las imperfecciones que se presuponen de su condición humana levanta polvareda. Fiel a su cita, la polémica tampoco ha eludido el encuentro con Mesías, pieza teatral que Teatro de La Abadía representa, desde hoy y hasta el domingo, en el Teatro Arriaga de Bilbao.
'El espectáculo es respetuoso con la figura de Jesús, con lo divino y con su mensaje, pero mete un varapalo tremendo a las religiones. Concretamente a la cristiana, aunque es trasladable a cualquier otro fundamentalismo', indica el actor Ernesto Arias, quien da vida a Jesús. Ésa sería la intención última de un texto de Steven Berkoff, inspirado por el libro La conspiración de Pascua, de Hugh Schonfield. Este montaje parte de una adaptación de Antonio Fernández Lera y ha sido dirigido, como un 'trabajo coral', por José Luis Gómez.
Mesías, que movió al obispo de Salamanca a enviar cartas de queja a varios diarios, luce una 'escenografía muy minimalista'. De ella se sirve para ofrecer una visión 'irreverente y provocativa' de un Jesucristo 'manipulador', y del acto fundacional del cristianismo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 25 de abril de 2002