Tres agentes del Cuerpo Nacional de Policía adscritos al turno de noche pasaron ayer a disposición judicial acusados de haber sustraído 3.000 euros a tres ciudadanos chinos que estaban de visita en Madrid para hacer negocios, según la Jefatura Superior de Policía. Las víctimas fueron identificadas y cacheadas tras detener los policías el vehículo en el que viajaban en la Gran Vía. A su regreso al coche comprobaron que les faltaba ese dinero, que llevaban en efectivo.
Los hechos ocurrieron en la madrugada de ayer, cuando los tres negociantes circulaban en un coche BMW por la Gran Vía. Tres agentes de paisano les ordenaron parar. Los policías, tras cachear a sus ocupantes y no encontrar nada extraño, les dejaron marcharse.
Los viajeros denunciaron el robo de los 3.000 euros en la comisaría de Centro, cuyos policías arrestaron a los agentes acusados, ya que las víctimas facilitaron las descripciones de los policías. Tras prestar declaración asistidos por abogados, los tres detenidos pasaron a disposición judicial. Ninguno de ellos tenía antecedentes por hechos similares, según la policía. Los acusados negaron en comisaría los hechos que les imputan los viajantes. La Policía Científica tomó huellas digitales en el vehículo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 26 de abril de 2002