Los 30 fiscales de la plantilla del Tribunal Superior de Justicia de Baleares reflejaron en su queja escrita y en declaraciones ante la Inspección de la Fiscalía General que "el estado de tensión y malas relaciones" con su hasta ayer jefe, Antonio de Vicente Tutor, había creado una situación "irreversible e insostenible", porque "la relación profesional" se encontraba "rota absolutamente" y no despachaba "asunto alguno". La Fiscalía General confirmó ayer la suspensión a Tutor.
En el caso Formentera, Tutor firmó la petición de imputación contra el ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas.
"No deja de ser irregular su conducta, afectando a la dignidad de la función fiscal", por sus "continuas broncas, incidentes y amenazas", se decía de Antonio de Vicente Tutor en un informe estudiado por la Fiscalía General tras la denuncia efectuada el 2 de abril por los fiscales de Ibiza, Mahón y Palma de Mallorca. "Él mismo no es consciente de la problemática, ni de la crisis existente debido fundamentalmente a su conducta", se añadía en el informe.
El jefe de la Inspección fiscal, Juan José Martínez Zato, encabezó la comisión que propuso el traslado de Tutor, de 61 años de edad, máximo responsable de la fiscalía balear desde hace 16 años. Tres fiscales de Palma dejaron constancia, en el acta de una junta, de "los incidentes", "amenazas" y "las continuas broncas" sufridas, y una cuarta testificó sobre un trato desconsiderado. Según los profesionales de Baleares, existía "abandono institucional por parte de la jefatura". Al jefe "nada" le consultaban pues "nada" les resolvía.
Tutor firmó la petición de citación como imputado ante el Tribunal Supremo del ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, por el caso Formentera. Lo hizo con el apoyo de 30 votos de la junta de fiscales. Y con 28 refrendos mantuvo la necesidad de investigar al mismo ministro en relación con la acusación del supuesto espionaje electrónico al PSOE, el caso Bitel.
El 'caso Formentera'
Pero la inspección recoge de estos testimonios que el fiscal de Ibiza, Antonio Torres, fue quien elaboró los informes del caso Formentera; el jefe suspendido no asistió a las declaraciones de testigos del caso y "recortó" uno de los escritos de Torres sin explicación alguna.
La Fiscalía General del Estado confirmó ayer la apertura de un expediente a Tutor y su suspensión cautelar por posible falta muy grave. "La conducta observada [en él] hacia sus subordinados ha llevado a esa fiscalía a una situación insostenible", se argumenta.
Según el comunicado difundido por la Fiscalía General, la situación era "insostenible", dado que "sus cambios de carácter imprevisibles, descalificaciones de la tarea profesional de los fiscales por motivos triviales o impartir órdenes empleando expresiones soeces han provocado que las relaciones del jefe con los fiscales sean en la actualidad prácticamente inexistentes".
Ladislao Roig, actual teniente fiscal de Baleares, ha asumido de forma provisional la jefatura de la fiscalía en este archipiélago. Roig ha reconocido que desde enero la situación era difícil, pero se decidió no actuar para que no coincidiera con la instrucción de los casos Bitel y Formentera.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 1 de mayo de 2002