Antonio Muñoz, único superviviente almeriense de los campos de exterminio nazis, presidió ayer el homenaje a las 142 víctimas de esta provincia. Muñoz, que mañana tendrá una calle en la capital y será nombrado hijo predilecto de la ciudad, comparó la Guerra con la que ahora vive Oriente Próximo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 6 de mayo de 2002