Emilio Díaz Berenguer fue contratado por FIBES, la organizadora de la muestra, para llenar de contenido una cita, insólita en el calendario de ferias europeas al haber elegido como hilo conductor la temática gay. Su lema es Deja salir el sol.
Pregunta. ¿Qué vende esta feria?
Respuesta. No es una feria. Es una muestra que está integrada por un núcleo central, que es el comercial y económico, una parte de debate social sobre la situación de los derechos de los gays y lesbianas y otra línea cultural y lúdica. Demuestra que lo normal es la diversidad. No tienes que pensar si el de al lado entiende o no.
P. ¿No teme que la etiqueta gay frene al público heterosexual?
R. Puede tener dos vertientes. Creo que echará para atrás a alguno que no se atreve y creará cierto interés para otros. Esta edición es como un test. No es exclusiva ni excluyente. ¿Qué es ser gay? En el ocio, la cultura y la moda hay una pautas lideradas en parte por homosexuales, pero participan también otras personas. El término gay es muy amplio.
P. La federación de gays y lesbianas Colega dice que la muestra es mercantilista y que contribuye a crear guetos.
R. Debe ser el único grupo que piensa eso porque aquí están la Federación Estatal de Lesbianas y Gays, las asociaciones de Cataluña, Valencia y la federación andaluza Somos, además de las administraciones públicas. Tenía un acuerdo con Colega, que estaban invitados a uno de los debates. Y si hablan de márketing, ¿por qué han aceptado una página de publicidad en su revista? Pero además, el poder económico ha visto que les interesa dirigirse al potencial consumidor gay, y lo hace con respeto, lo que refuerza la autoestima e identidad del gay. ¿Por qué vamos a rechazar esta oferta? Esto no es un gueto; aquí hay gente que entiende y gente que no.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 10 de mayo de 2002