La fusión de Canal Satélite Digital y Vía Digital provocó ayer un alud de reacciones. Desde el Gobierno, ministros como Rodrigo Rato, Mariano Rajoy o Pilar del Castillo expresaron su respeto a las decisiones que adoptan las empresas privadas. Hubo una excepción. El ministro de Fomento, Francisco Álvarez Cascos, cuestionó la operación e incluso insinuó su fracaso. En abierta contradicción con la doctrina de 'plataforma única' que el propio Cascos defendió desde la vicepresidencia del Gobierno en 1997, el ministro relacionó ayer la operación con la existencia de 'monopolios privados insufribles'.
Álvarez Cascos se pronunció ayer contra la operación firmada el miércoles por Telefónica y Sogecable con la misma contundencia, al menos, con la que en el año 1997, siendo vicepresidente primero del Gobierno y ardiente defensor de la teoría del "interés general" del fútbol, defendió la necesidad de que España contara con una única plataforma de televisión digital. Efectivamente, en enero de 1997 y al término de un mitin celebrado en Barcelona, el entonces vicepresidente aseguró: "Pensamos, y seguimos pensando que el mercado audiovisual español aconseja el desarrollo de una plataforma única. No es que eso sea una condición dogmática, pero todos coinciden en que una plataforma en este caso es mejor que dos, sobre todo porque las plataformas son vehículos para competir, no son instrumentos de competencia. En segundo lugar, que esa plataforma única esté abierta a todos, esté abierta a todos los grupos que pueden aportar su tecnología o que pueden aportar su experiencia y su actividad en materia de contenidos informativos".
Ayer, la tesis de Álvarez Cascos fue exactamente la contraria, aunque defendida, también, con vehemencia. Al valorar la fusión, Cascos señaló que "los monopolios públicos son rechazables, y por eso no forman parte de la política del Gobierno, pero los monopolios privados son insufribles". El titular de Fomento se adelantó incluso a las lógicas actuaciones administrativas y señaló que el Servicio de Defensa de la Competencia "tendrá mucho que decir tanto en el aspecto de monopolio para el uso de la plataforma tecnológica, como para el monopolio del disfrute de los derechos de pago de los contenidos que forman parte de este acuerdo". Según Álvarez Cascos, la decisión de Competencia, que será "muy exigente" con la operación, dejará pequeña la que tomó en su día con la fusión Endesa-Iberdrola [que fracasó].
Sobre estas declaraciones, el presidente de PRISA, Jesús de Polanco, dijo, tras la entrega de los premios Ortega: "No entiendo de Cascos, sino de palabras". "Lo que se va a hacer es tan racional que cualquier servicio de [defensa de] la competencia, aquí o en Europa, lo entendería así, porque de lo que se trata es de salvarse o no y la gente querrá que se salve", añadió. Polanco recordó, por otro lado, que aún falta la aprobación.
Otros ministros del Gobierno, desde el titular de Economía, Rodrigo Rato, hasta el responsable de Interior, Mariano Rajoy, y la responsable de Educación, Pilar del Castillo, destacaron el respeto a las decisiones que toman las empresas privadas. Desde Miami, informa Isabel Piquer, el ministro Portavoz, Pío Cabanillas, expuso la valoración oficial del Ejecutivo: "Es una decisión empresarial en la que no ha intervenido el Gobierno. Se enmarca en el contexto de concentración de empresas a nivel internacional. No es un caso aislado. Es una fusión que ha de someterse al procedimiento normal que protege el derecho del consumidor y la libre competencia (...). La vida de las empresas la determinan sus empresarios". En la misma línea, Rato señaló: "Es una decisión que podría tener una dimensión europea, pero que podría también ser analizada por las autoridades españolas y eso dependerá de nuestras conversaciones con la UE. En ésta, como en cualquier otra fusión, el Gobierno velará por los intereses de los consumidores".
El PSOE, en boca de su secretario de organización, José Blanco, lo calificó de "positivo", y el diputado Alfredo Pérez Rubalcaba destacó que muestra "el fracaso" de la política de medios del Gobierno "que ha costado mucho dinero a las empresas y a los contribuyentes". Para el coordinador de IU, Gaspar Llamazares, "no es una buena noticia", al poner en riesgo la pluralidad de contenidos. Desde la empresa, el consejero delegado de Endesa, Rafael Miranda dijo que la fusión es "razonable". La Asociación de Usuarios de la Comunicación señaló que es "un acuerdo no negativo si se garantiza la pluralidad de contenidos".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 10 de mayo de 2002