El consejero de Empleo, Joseba Azkarraga, aseguró ayer en el Parlamento que no existen 'datos objetivos' que relacionen la muerte de 27 trabajadores de la empresa química Atofina, de Hernani, con la actividad laboral que desarrollaban. Azkarraga compareció ayer a petición propia ante la comisión de Trabajo para explicar las actuaciones de su departamento después de que CC OO denunciase el año pasado que un analista de laboratorio de la firma había contraído cáncer por su contacto con benceno.
La Fiscalía de Guipúzcoa ha abierto diligencias informativas para investigar una denuncia del mismo sindicato relativa a los fallecimientos durante los últimos 12 años de 27 trabajadores de Atofina, por si se hubiesen producido como consecuencia de un cáncer contraído en relación con su trabajo.
Azkarraga precisó que junto a la muerte del analista tan sólo hay constancia de otro fallecimiento en 1994 en la empresa Atofina debido a una enfermedad profesional, aunque no relacionada con la exposición a sustancias cancerígenas. El consejero adelantó que el Instituto Vasco de Salud Laboral-Osalan investigará la actuación del servicio médico de la empresa guipuzcoana y, cuando concluya su informe, pedirá a la planta que realice una auditoría.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 10 de mayo de 2002