Los Mossos d'Esquadra decomisaron ayer una nueva partida de droga en Lleida, supuestamente perteneciente a la misma banda de narcotraficantes desarticulada el pasado jueves y cuyo cabecilla era Josep Ramon J. B., funcionario del centro penitenciario de Ponent y dirigente del sindicato Catac. Los agentes descubrieron 3,4 kilogramos de cocaína y 1.042 pastillas de éxtasis en un almacén situado en el barrio de La Bordeta. Este decomiso es el resultado de la segunda fase de las investigaciones iniciadas a principios de año por un presunto tráfico de sustancias estupefacientes en algunas comarcas de Lleida y que el pasado jueves se saldaron con la detención de ocho personas y la incautación de más de dos kilos de speed. Según informó ayer un portavoz de la policía autonómica, con la droga intervenida se habrían podido obtener, una vez manipulada, un total de 34.200 dosis de speed y 45.000 de cocaína, que habrían proporcionado a los traficantes unos beneficios de 276.200 euros. En el registro del almacén, alquilado por el funcionario de prisiones detenido, los agentes encontraron también 101.000 euros.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 13 de mayo de 2002