El presidente argentino, Eduardo Duhalde, sugirió ayer al ministro de Economía que 'utilice los bienes del Estado, miles y miles de inmuebles y tierras, como forma de compensar los depósitos y de darle garantías a los ahorradores'. Pero luego Eduardo Amadeo, portavoz de Duhalde, aclaró que 'sólo se trata de una idea para que se analice'.
Cuatro meses después de manipular la 'bomba de tiempo activada', como el propio Duhalde llamó en enero al corralito financiero que impuso restricciones al retiro de dinero de los bancos y retuvo los depósitos de los ahorradores, el Ejecutivo no tiene todavía una solución al problema que mantiene paralizada la economía argentina. El proyecto de canjear el dinero de los depósitos a plazo de forma compulsiva por bonos a pagar dentro de diez años está al borde del fracaso. No hay garantías suficientes para esos títulos de deuda. La idea lanzada ayer de compensar a los ahorradores con patrimonio fiscal es otra de las que probablemente termine en nada.
Los ahorradores reclaman su dinero en la moneda original que depositaron en los bancos y rechazan un canje de títulos de deuda y, de momento, cualquier otro tipo de compensación.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 14 de mayo de 2002