Selecciona Edición
Selecciona Edición
Tamaño letra

El etarra detenido en Francia colocó cuatro coches bomba en 2001

El etarra detenido el miércoles en la localidad francesa de Annonay, cerca de Lyon, ha sido identificado como Ismael Berasategi Escudero, de 32 años, a quien se acusa de haber participado en la colocación de cinco coches bomba durante 2001 como miembro del comando itinerante Behorburu. Los servicios antiterroristas investigan además su posible participación en el asesinato del presidente del PP de Aragón, Manuel Giménez Abad, el 6 de mayo del año pasado en Zaragoza.

Berasategi, que portaba una pistola y documentación falsa a nombre de un tal Unai, fue sorprendido cuando intentaba robar con un ziriak (artefacto fabricado por ETA para abrir coches) un Renault 19 junto a otra persona. Ésta logró escapar en compañía de un tercero a bordo de un Ford Mondeo que esperaba en las inmediaciones. El ahora detenido huyó el 18 de diciembre tras la desarticulación de la infraestructura del comando legal itinerante en el que estaba encuadrado.

Asesinato de Giménez Abad

Este grupo colocó los siguientes coches bomba: el que fue desactivado el 22 de enero de 2001 en Getxo (Vizcaya); el explosionado en Gandía (Valencia), el 18 de marzo siguiente; el desactivado en el aeropuerto de Málaga el 27 de julio; el que estalló en Salou (Tarragona) el 18 de agosto, y el que explotó en el aeropuerto de Madrid nueve días después. También se investiga si participó en el asesinato de Giménez Abad y si el arma que portaba es la HS de fabricación croata con la que se perpetró el crimen.

Por otra parte, el comando Madrid recién desarticulado disponía de cinco cuadernos y tres carpetas con unos 1.400 nombres de posibles objetivos. La información estaba muy poco elaborada (listados de miembros del PP y PSOE, de la última promoción de policías, jueces, periodistas, empresarios y militares). "La mayoría eran simples nombres, sin seguimientos ni anotaciones, una lista que les habría entregado la dirección de la banda en Francia", indicaron fuentes de la lucha antiterrorista. No obstante, el comando tenía "algo más trabajada" la información sobre una treintena de objetivos, había recibido instrucciones de atentar durante la cumbre que se celebra ya en Madrid y lo primero que iban a hacer era intentar asesinar a dos policías con una bomba lapa.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 17 de mayo de 2002