Enrique González de Amezúa, presidente de la Real Academia de las Bellas Artes de San Fernando, se mostró ayer indignado por las imágenes que contempló en televisión de los jugadores del Madrid encaramados en la Cibeles. 'Es un disparate que se les permita a los futbolistas subirse en la diosa. El mármol del que está hecha es muy delicado... y no paraban de patearla. La estatua es un patrimonio de todos y hay que velar por su conservación'.
La directiva de la Real Academia de San Fernando se reunirá el próximo lunes y tratará este asunto. 'Vamos a analizar lo sucedido y a estudiar qué podemos hacer. Está claro que mandar cartas al alcalde, como hemos hecho otras muchas veces, no sirve de nada. Queremos ver si podemos emprender acciones legales por vulnerar la ley de Patrimonio'.
Cibeles, conocida por los griegos como Rea, es la diosa de la naturaleza y de la fertilidad. Es la divinidad más antigua de Asia Menor. Nació en Frigia, fue la madre del titán Cronos y estaba considerada como la progenitora de los dioses olímpicos. Cibeles gobernaba sobre las montañas y sobre todas las fuerzas, por lo que se la representa con una corona con forma de muralla y siempre acompañada de leones. En 1767, bajo el reinado de Carlos III, el Conde de Aranda encargó el diseño del Salón del Prado (que incluía nuestra querida fuente) a José de Hermosilla, aunque fue finalmente Ventura Rodríguez quien, valiéndose de sus influencias, ejecutaría este proyecto. La fuente de la Cibeles se instaló en 1782. Fue esculpida en mármol cárdeno de Montesclaros (Toledo).
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 18 de mayo de 2002