La Sociedad Protectora de Animales de Alicante rescató el pasado viernes una treintena de avestruces abandonadas en una granje de Aspe, intervenida por el Ayuntamiento por quiebra de la explotación. Los animales llevaban una semana sin recibir agua ni alimento y, según Raul Mérida, director de la organización, 'se encontraban en estado de deterioro total, aunque se recuperan en las instalaciones de la Sociedad Protectora'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 21 de mayo de 2002