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Trabajadores de hormigones se manifiestan ante la sede de ELA

Medio centenar de trabajadores del sector de canteras y hormigones contrario de Vizcaya contrarios a la huelga que sostiene ELA protestaron ayer ante la sede de ese sindicato en Bilbao para exigir a sus dirigentes que pongan fin a un paro que se prolonga ya 37 días. Los responsables de las federaciones de la Construcción de UGT y de CC OO, Arturo Rodríguez e Iñaki Merino, responsabilizaron a ELA de los numerosos despidos que se está produciendo en la construcción al faltar hormigón y de que muchos trabajadores no puedan ni cobrar el subsidio ya que el Inem se lo deniega.

Arturo Rodríguez acusó a ELA de hacer la huelga por la fuerza y con 'liberados' y dijo que la única explicación de la concentración frente al sindicato nacionalista es que 'la gente está harta y pide el cese de los piquetes'. 'Si no paran la huelga, los trabajadores irán a pedirle a Elorrieta que les dé de comer', indicó. La huelga de canteras y hormigones comenzó al no aceptar ELA, mayoritario en el sector, el convenio firmado por UGT, LAB y CC OO, que incluía una subida salarial del 5,2% para este año y el 150% del IPC para el próximo, mientras que ELA pide un incremento salarial del 7%.

Durante la concentración se produjeron enfrentamientos verbales entre los trabajadores contrarios a la huelga y los que defienden el paro, aunque no se produjeron incidentes y la Ertzaintza no tuvo que intervenir. Una veintena de camiones hormigoneras se sumaron a la protesta, lo que provocó un colapso del tráfico que pudo paralizar el centro de Bilbao si la Policía Municipal no les llega a impedir entrar hasta allí. En un comunicado, ELA calificó la concentración de 'acto de esquirolaje organizado por la patronal' y aseguró que muchos de los concentrados eran 'directivos de las empresas' y que el representante de la patronal en la mesa negociadora seguía el acto desde las cercanías.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 22 de mayo de 2002