Desde 1993 ha habido cuatro intentos de demoler parte del templo de Nuestra Señora de las Fuentes (Fuencarral), que se levantó en contra de la normativa porque está pegado a un bloque de pisos. En 1995, tras la sentencia que así lo establecía, operarios municipales intentaron acometer el derribo. El arzobispado lo impidió alegando 'la necesidad de mandamiento judicial de entrada' e interponiendo un recurso. En 1996, el párroco evitó de nuevo el cumplimiento de la orden.
En 1997, medio millar de feligreses se plantaron en el templo e impidieron el derribo. Los jueces autorizaron al Ayuntamiento a utilizar 'las fuerzas de orden público' contra todo aquel que evitara la demolición. Hace dos años, de nuevo 300 fieles se opusieron a la ejecución de la sentencia. El tribunal recordó al Consistorio que debería haberlo previsto, y que estaba autorizado a emplear 'todos los medios a su alcance' para comenzar la obra.
'La actuación municipal', recordó entonces la sala, 'intenta dilatar la ejecución de la sentencia, llevando a cabo actuaciones que no indican una voluntad real del cumplimiento de la misma, y que podrían calificarse de aparentes o ficticias'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 23 de mayo de 2002