Pedro Almodóvar y Antonio Banderas volverán a trabajar juntos en la película Tarántula, una historia de amor y venganza que transcurre en 2010. Así lo declaró ayer el director español en Cannes, donde hoy entrega el premio al mejor director y donde se reunió con el actor malagueño
Tras quince años de separación, el actor y el cineasta trabajarán de nuevo juntos en un filme en el que también intervendrá la actriz Penélope Cruz. Almodóvar y Banderas cerraron su acuerdo el viernes por la noche, según señalaron a los periodistas. Almodóvar confirmó que está escribiendo ya el guión y que tanto él como Banderas están por la labor, pero que será preciso tener en cuenta cuestiones de agenda para fijar las fechas del rodaje. "Hay un deseo mutuo y tenemos la idea adecuada", pero habrá que esperar "a que termine el guión para poder rodar, y entonces tendrá que darse la coincidencia de que Antonio no esté ocupado".
La película, añadió el productor Agustín Almodóvar, "se rodará en España y en español" y sus dos principales decorados serán "algo así como una especie de cortijo o una finca castellana", donde vive el protagonista, un cirujano plástico, y "un segundo decorado natural muy importante en Galicia". "Compramos hace un par de años los derechos de esta novela, que en francés se llama Mygale, de Thierry Jonquet, un escritor de serie negra, de cuarenta y pocos años". La historia narra la venganza que planea una eminencia en cirugía estética.
Banderas, que se encuentra en Cannes como co-protagonista del filme Femme Fatale, de Brian de Palma, proyectado ayer fuera de concurso, tiene pendiente un rodaje entre Barcelona y Argentina, al que dedicará el otoño, y en febrero empieza a ensayar un musical en Broadway. El próximo verano rodará El Zorro II.
De su trabajo con Brian de Palma, Banderas comentó a la prensa, en inglés y a veces en español, que al principio no estaba muy convencido con su personaje, por lo que elaboró un informe para reforzar lo que creía eran sus principales debilidades y alejamientos de la realidad. Pero ninguna de sus propuestas fue aceptada por De Palma, quien le explicó que ésa era su película y que él "era ya muy viejo para estar interesado en la realidad" que Banderas le proponía incluir o en cualquier otra. El actor añadió: "desde el momento en que dije sí, acepté hacer lo que él me pedía".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 26 de mayo de 2002