El delegado del Gobierno en Ceuta, Luis Vicente Moro, declaró ayer sentirse "ofendido y molesto" por las conclusiones del informe de la ONU sobre malos tratos a menores inmigrantes marroquíes en las dos ciudades autónomas y afirmó que revela "un grave desconocimiento" del fenómeno migratorio infantil y que el documento está fundamentado en los que previamente habían elaborado organizaciones como Amnistía Internacional o Human Rights Watch, "cuyos resultados fueron ciertos, pero referidos a un periodo que ya ha pasado, porque los defectos de los que hablan se han corregido en los últimos cuatro años".
Según el delegado del Gobierno, los niños magrebíes (unos 100 según el último censo de la Consejería de Bienestar Social) "tienen cubiertas todas sus necesidades básicas, desde el alimento al calzado"; subrayó también que es "falso" que no se les atienda y para demostrarlo explicó que el Insalud gasta dos millones de euros al año en tratar a menores acogidos tanto en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) como por Bienestar Social.
En lo que respecta a las repatriaciones, muy criticadas en el informe, comentó que se cumple "a rajatabla" con la legislación y que se trabaja "codo con codo" con la Fiscalía de Menores "en la búsqueda de los familiares en Marruecos o Argelia". El delegado alabó la labor policial, duramente denunciada también, "porque la policía de Ceuta jamás ha maltratado a los niños; al contrario, a veces los ha rescatado de situaciones muy dolorosas".
La Delegación del Gobierno ha enviado una carta al Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, y otra al ministro de Exteriores, Josep Piqué, en las que reitera la necesidad de que se visite a los menores "para que las altas instituciones del Estado comprueben por sí mismas las circunstancias que realmente se dan en Ceuta".
Visita de incógnito
"Lo que debe hacer el Defensor del Pueblo es desplazarse lo antes posible y de incógnito, si lo considera más eficaz, para dar fe de la auténtica realidad de la inmigración en Ceuta y Melilla", explicó Moro en una rueda de prensa. La adjunta al Defensor, María Luisa Cava Llano, declaró aye a la Cadena SER: "Seguro que iré a Ceuta porque voy por todo el territorio nacional comprobando la situación de los centros de menores; pero no sé cuándo, y tampoco tengo intención de avisar, porque me gusta ir a los sitios cuando nadie me espera".
El delegado ha hecho extensible la invitación de visita a la secretaria de Asuntos Sociales, Concepción Dancausa. "Los primeros interesados en que se respete la integridad de los menores somos nosotros", añadió.
Por otra parte, la Consejería de Bienestar Social ceutí ha constatado un ligero aumento en el número de menores acogidos en el centro de La Esperanza, cuyo censo roza ya el centenar, según el último registro de niños. Bienestar Social advierte de que en las últimas tres semanas 20 menores más han llegado al centro de acogida.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 11 de junio de 2002